Una vacuna introduce al organismo una parte inofensiva o debilitada del virus o bacteria, enseñando al sistema inmune a reconocer y combatir la enfermedad sin causarla.
Por Melissa Brosset. 15 octubre, 2025. Publicado en Diario Correo, el 11 de octubre de 2025.La vacunación es uno de los mayores logros de la salud pública mundial. En el Perú, el esquema nacional de vacunación incluye 18 vacunas que protegen contra 28 enfermedades, además de estar alineado a las recomendaciones de la OMS. Una vacuna introduce al organismo una parte inofensiva o debilitada del virus o bacteria, enseñando al sistema inmune a reconocer y combatir la enfermedad sin causarla.
Cada año, la vacunación infantil previene entre 3.5 y 5 millones de muertes; además de proteger a cada niño, contribuye a la inmunidad comunitaria. Cuando la mayoría de personas están vacunadas, se forma una barrera que protege a quienes no pueden recibir vacunas, como los inmunocomprometidos. Gracias a ello, enfermedades graves como sarampión, polio, tétanos o tos ferina han disminuido drásticamente.
Sin embargo, cuando la cobertura desciende, los brotes resurgen. En 2025 se han reportado casos de sarampión, fiebre amarilla y tos ferina en Latinoamérica. Incluso en España, con 95% de cobertura, se notificaron 142 casos de sarampión, asociados a contagios importados.
Los riesgos de la vacunación son mínimos: dolor local, fiebre leve o malestar. Reacciones graves, como convulsiones febriles o anafilaxia, son extremadamente raras y controlables. A pesar de los mitos, no existe vínculo entre vacunas y autismo; la ciencia lo ha demostrado de forma concluyente.
Vacunar es un acto de responsabilidad y confianza en la evidencia científica. Seguir el calendario protege a los niños, a las familias y a la comunidad. Mantener una alta cobertura es la mejor garantía de un futuro más saludable.
